
Washington.- El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó este jueves una orden ejecutiva destinada a impulsar la explotación nacional de minerales críticos y tierras raras, un sector estratégico dominado por China.
«He firmado una orden ejecutiva para aumentar drásticamente la producción de minerales críticos y tierras raras», anunció el mandatario durante un evento en la Casa Blanca.
La orden permite a Trump invocar poderes de emergencia para fomentar la explotación doméstica de estos materiales y reducir la dependencia de terceros países, en un esfuerzo por reforzar la seguridad y competitividad tecnológica de EE.UU.
Objetivos de la orden ejecutiva
La medida se sustenta en la Ley de Producción de Defensa, una legislación promulgada en 1950 durante la Guerra de Corea, que faculta al presidente para movilizar fondos y otorgar incentivos al sector privado.
El decreto tiene dos objetivos principales:
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Facilitar la concesión de permisos para la explotación de los minerales disponibles en territorio estadounidense.
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Proporcionar financiación a través de préstamos y otros incentivos económicos a las compañías que emprendan proyectos en este ámbito.
Esta iniciativa responde a la creciente preocupación de EE.UU. y sus aliados, incluida la Unión Europea, por el control casi absoluto que ejerce China sobre este sector estratégico.
La relevancia de las tierras raras
Los minerales críticos, entre los que se incluyen el litio, el cobalto, el grafito y el níquel, son fundamentales en la fabricación de diversos productos tecnológicos, desde semiconductores para sistemas de defensa hasta paneles solares y baterías para vehículos eléctricos.
China no solo lidera la explotación de estos materiales, sino que también domina el proceso de refinado, absorbiendo incluso importaciones de otros países para procesarlas en su territorio. Debido al impacto ambiental del refinado, muchas naciones han evitado desarrollar este proceso en sus propias regiones, lo que ha fortalecido el monopolio chino en la industria.
Un tema clave en la geopolítica
El impulso a la producción de tierras raras no es una estrategia nueva en EE.UU. Durante su primer mandato (2017-2021), Trump ya firmó una orden ejecutiva con el objetivo de fomentar la explotación nacional de estos minerales. Posteriormente, en 2022, el presidente Joe Biden también recurrió a la Ley de Producción de Defensa para incentivar el sector y facilitar a las empresas el acceso a 750 millones de dólares en financiamiento.
Además, el acceso a estos minerales ha sido un punto clave en las negociaciones entre EE.UU. y Ucrania. Se estima que el país europeo podría albergar hasta el 5 % de las reservas mundiales de tierras raras. Trump impulsó conversaciones con el presidente ucraniano, Volodímir Zelenski, para garantizar un acuerdo que permitiera a EE.UU. cierto control sobre el sector de minerales críticos en Ucrania. Aunque el pacto no se concretó tras desacuerdos entre ambas partes, Trump afirmó que las negociaciones se han retomado y que el acuerdo con Kiev sobre tierras raras se firmará «muy pronto».
Con esta nueva orden ejecutiva, la administración Trump refuerza su estrategia para reducir la dependencia de China en sectores clave y fortalecer la industria minera nacional, con miras a consolidar el liderazgo tecnológico y económico de EE.UU.